La violencia es un problema muy grave que afecta la seguridad, dignidad y libertad de las personas provocando daños físicos, psicológicos, económicos y sexuales con consecuencias que podrían cambiar la vida de quienes la sufren. Según la OMS, la violencia es el “uso intencional del poder, la fuerza física y psicológica en contra de uno mismo, otra persona, un grupo o una comunidad”.
Es también un problema “estructural” y “cultural” en relación con las acciones que indirectamente generan violencia, como las injusticias sociales, la desigualdad, el lenguaje, símbolos y conductas que limitan el acceso a derechos.
¡Dejémoslo claro! Es importante que rechacemos cualquier forma de violencia, dominación o manipulación. No es normal que alguien agreda y considere inferiores a los demás.
Ten presente que la violencia es un fenómeno que está presente o que puede aparecer, y en muchos casos, ocurre como si fuese algo natural. Por esta razón, es una constante en la vida de millones de personas, especialmente de mujeres, niñas, niños, adolescentes, adultos mayores, personas con discapacidad, la comunidad LGBTIQ+ y otros grupos minoritarios.
La violencia puede traer consecuencias nefastas para el desarrollo y autoestima de las personas que sufren ataques y otras formas de intimidación. Lo más grave, es que usualmente la violencia ocurre en los espacios en los que las personas deberían estar más seguras: sus hogares, escuelas y lugares de trabajo.
Sin embargo, si logramos reconocer el problema, podemos prevenir ser víctimas y participar en estos comportamientos. Ten en cuenta que la violencia puede iniciar por hechos que parecen “inofensivos” como: mentir, ignorar, chantajear, prohibir, celar, puede avanzar a acciones de ofensa, humillación, amenazas y llegar al límite de los golpes, abuso sexual e incluso la muerte.
Imagen de Pixabay.
En el caso de la violencia ejercida contra uno mismo, es decir “autoinfligida”, puede manifestarse por medio de autolesiones, descuido personal o el suicidio. Las causas podrían estar relacionadas a otras formas de violencia, pero este tema se necesita abordar desde el ámbito de la salud mental.
Identifiquemos las expresiones de violencia en nuestro entorno y si sientes que eres víctima de agresiones, vence el miedo y ¡Busca ayuda!
Llama al número de emergencias a nivel nacional (911), al 1800 DELITO (335-486), reporta el suceso en las Unidades de Policía Comunitaria (UPC), también puedes poner la denuncia en la Fiscalía más cercana o de forma virtual aquí. Otra alternativa es denunciar en las Unidades Judiciales de Violencia contra la Mujer y la Familia o en Juzgados Multicompetentes, conoce dónde están aquí.
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